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Discurso de Rafael Barberá.
Director de Ordenación de la Seguridad
Social.
En primer lugar agradecer a Fraternidad-Muprespa que un año
más, haya contado con mi presencia en la entrega de estos premios
de los que quiero destacar su importancia, porque es una forma de
reconocer el esfuerzo que estamos haciendo todos y especialmente
las empresas, para mejorar la prevención y reducir la siniestralidad
laboral que está subiendo de manera importante.
Es cierto que se está elevando y todos tenemos que luchar para
que esto no sea así. Desde nuestro punto de vista y viendo las
estadísticas tampoco es que este año sea un año diferente, no
hemos ido a peor, simplemente hay una elevación de la afiliación a
la Seguridad Social, al haber más trabajadores hay más accidentes,
igual que hay más bajas en contingencia común, lo que debemos
intentar es que esos accidentes no sean más, sino que se reduzcan;
no quiero que se entienda que la accidentalidad está disparada y
que está mucho peor que en años anteriores, porque no es así.
En el estudio de la que fue posteriormente la Ley 35/2014
consideramos que era una buena idea que se incorporase un papel
más activo a las actividades preventivas, por ejemplo, facilitando
el trabajo de aquellos trabajadores que por accidente de trabajo,
entran en una discapacidad sobrevenida; de esa forma nosotros en
la Ley lo que hacemos es dar a la mutua un papel mucho más
activo, un papel más colaborador tanto con el trabajador como con
la empresa, para que puedan ayudar a recuperarse de la forma
más rápida posible al trabajador que ha sufrido ese accidente, y
por tanto adaptarse a esa nueva situación en la que se encuentra.
También a la empresa para que el puesto de trabajo pueda adaptarlo
a la situación actual, o que pueda buscarle un trabajo alternativo.
Porque el hecho de sufrir un accidente de trabajo y quedarse con
una discapacidad, no sea quedar automáticamente marginado
y que se sienta inútil, sino que pueda seguir colaborando con
la empresa, en ese puesto adaptado o en otro en el que pueda
desarrollar su actividad.
Esto es una labor importante y que las empresas deben exigir a
las mutuas ya que ellas tienen capacidad para hacerlo y ahora
mismo tienen el apoyo legal para desarrollarlo. En ese sentido
creo que es importante y es un avance más en la lucha, no sólo la
prevención sino también el apoyo de aquellas personas que sufren
un accidente de trabajo, ya que es otra de las “patas” en la que la
Seguridad Social tiene que estar muy involucrada.
También y haciendo mención al día 28 de abril, es una forma de
destacar la importancia de la prevención. Nosotros en la Seguridad
Social estamos convencidos de que la prevención es importante
y de hecho consideramos que junto con los empresarios que son
los que realmente pagan la prevención, los otros financiadores
fundamentales, no somos otros que la Seguridad Social. Aparte
de realizar la actividad de prevención a través de las mutuas
con la prevención con cargo a cuotas, además somos los únicos
financiadores de la Fundación para la Prevención de Riesgos
Laborales y además financiamos el INSHT con 1.000.000€ todos
los años con la encomienda de gestión. Estamos involucrados
plenamente en todo lo que tiene que ver con prevención.
La prevención a veces sólo es noticia cuando hay un accidente de
trabajo y no es noticia que las empresas y la sociedad española en
su conjunto está involucrada en la prevención, que se ha mejorado
mucho, que se hacen muchas actividades nuevas. Sólo es noticia
cuando por el motivo que sea, hay un fallecido, pero nadie se ha
preocupado de saber, ni porqué se ha producido el accidente, ni qué
problemas hay para que se haya producido…, porque puede haber
muchas causas, no sólo de prevención sino otras muchas.
Quiero destacar que los premios son positivos porque son la imagen
amable de la prevención y es que aquellos que se dedican a esto,
saben que la prevención no es sólo el día 28 de abril, sino que va
desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre de cada año, es una
labor continua, constante y que no se puede relajar. Creo que es
importante el premio, pues reconoce el esfuerzo que se hace por
parte de las empresas, porque nosotros sabemos que no se hace
sólo para conseguir el premio sino que es su labor día a día, la labor
en los servicios de prevención de las entidades y de todos aquellos
que están preocupados por la salud y la seguridad en el trabajo de
todos los trabajadores en España.
Por tanto yo quiero felicitar a todas las empresas que han
participado en esta IV edición y dar mi máxima enhorabuena a
aquellos que aparte de participar han conseguido los premios que
posteriormente se les van a entregar.
Añadir una cosa, esto es un incentivo, que puede ser económico o
no económico, parece que el económico es el que más importa, pero
el reconocimiento del esfuerzo es muy importante y esto tiene un
problema añadido, cuando uno recibe un premio por haber hecho
una buena labor, ese premio no solo reconoce la labor que se ha
hecho, sino que a uno se le exige mantener el mismo nivel el resto del
tiempo. El incentivo está en yo lo hago, porque creo que tengo que
hacerlo, lo hago bien y ahora mi reto siguiente es seguir haciéndolo
igual o mejor en el futuro. Y eso es lo que quiero agradecer, el
esfuerzo que las empresas hacen, no solo por conseguir ese premio,
no solamente por participar, sino porque saben que de esa forma
se introducen en una dinámica positiva donde cada día tienen que
ser mejores que el día anterior, mejorando la prevención de sus
empresas, y consiguiendo reducir al máximo su accidentalidad.
Nuestra enhorabuena a las empresas premiadas, por supuesto a la
Mutua por la iniciativa y a todos ustedes por su presencia.