25/11: ÚNETE a las iniciativas para eliminar la violencia contra las mujeres
Dada la necesidad social de seguir dirigiendo la mirada hacia las mujeres que viven situaciones de violencia de género, cada 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la Organización de Naciones Unidas continúa este año con una iniciativa que arrancó en 2023: la acción “Los 16 días de activismo”, que enlaza esta jornada con la del 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos.
Se pone así de manifiesto una vez más que ejercer violencia contra las mujeres es violar los derechos humanos. Es la forma de violencia más generalizada: se estima que, a nivel mundial, 736 millones de mujeres, casi una de cada tres, han sido víctimas de violencia física o sexual por parte de su pareja, de violencia sexual fuera de la pareja o de ambas, al menos una vez en su vida.
Esta iniciativa está relacionada con la campaña ÚNETE, que busca, de aquí al año 2030, para poner fin a la violencia contra las mujeres a través de la adopción de medidas de concientización, con iniciativas a escala mundial, involucrando a gobiernos, entidades vinculadas al desarrollo, sociedad civil, organizaciones por los derechos de las mujeres, la juventud, sector privado, medios de comunicación y, en general, a todo el sistema de Naciones Unidas para llamar la atención sobre cómo combatir esta lacra.
Hacerlo es clave porque los países con legislación contra la violencia hacia las mujeres tienen tasas más bajas que aquellos que carecen de ella.
Si la fecha es importante cada año, y por ello Fraternidad-Muprespa da voz a este grave problema social, lo es más este año ya que se cumple el 25º aniversario desde que la Asamblea General de las Naciones Unidas designó esta fecha como Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en memoria de las hermanas Mirabal, brutalmente asesinadas ese día en 1960.
Aún hoy mujeres y niñas siguen siendo asesinadas por razones de género, pero también es una jornada para poner en valor a todas aquellas que suelen ser objetivo de violencia, por ser defensoras de los derechos humanos, activistas y portavoces de la sociedad civil en la materia.
Este año la campaña ÚNETE se centra en promover la movilización para que quienes ejercen este tipo de violencia rindan cuentas. Además también se busca la promoción del asociacionismo impulsor de políticas que pongan fin a la violencia contra las mujeres en contextos nacionales pero también transnacionales.
Para instaurar una conciencia de repulsa real a la violencia contra las mujeres, la campaña anima además a llevar a cabo acciones tan sencillas como hablar en el hogar, el colegio, el instituto o la universidad, en los centros de trabajo en general, los lugares de reunión, sobre lo que significa y supone la tolerancia, y adoptando, en el ámbito empresarial políticas que vayan en esta línea, que apoyen a las víctimas.