Voy a intentar plasmar mi agradecimiento sin aludir a la patología que me trajo a los grandísimos profesionales de Fraternidad Fuengirola. Todos desde recepción, limpieza, administración, tienen siempre una amabilidad y cercanía que, aunque ir a una consulta médica nunca es del agrado de nadie, te hacen sentir en un ambiente de confianza. Pero quiero dar especialmente las gracias a la doctora María Victoria del Pilar Serrano Samperio que, tanto a nivel profesional como personal no ha reparado en facilitar el que ahora afronte la última etapa de mi recuperación con esperanza. Gracias por cruzarse en mi camino cuando más necesitaba a una profesional como usted. Todo mi respeto y gratitud.